lunes, 27 de julio de 2009

SE NECESITA IMAGINACION PARA CONSTRUIR PODER

Estamos encerrados en un atolladero político de no entendimientos, de conflictos, muchos de los cuales son más que fabricados que reales, que nos imposibilita llegar a un acuerdo y ponernos a construir el ansiado desarrollo del país. Ya no solo los partidos de la oposición están enfrentados con el Ejecutivo sino que hasta los propios oficialistas están distanciados y enfrentados entre sí. Es imprescindible edificar una nueva arquitectura del poder que sea transgresora en la forma de ideación e implementación pero absolutamente protectora en lo que se refiera a la esencia democrática que nos indica la Constitución Nacional.

Sin embargo, es inaudito que todos los partidos políticos y los sectores sociales reclaman cambio pero al mismo tiempo son incapaces de construir instrumentos con los que pudieran construir ese cambio. Campea un internismo brutal que apoca toda posibilidad de integración y articulación. No somos capaces de construir un modelo en que nuestros intereses particulares no sean excluyentes, que permita que otros intereses particulares también tengan cabida en un proyecto de estado nacional, en que podamos ganar todos y no solamente algunos.

Como si el viejo tribalismo de nuestros antepasados guaraníes aflorara en la cotidianidad de nuestros días y nos pusiéramos a guerrear todo el tiempo con nosotros mismos, con nuestros iguales. La experiencia de estos 20 años de democracia nos está señalando la necesidad de corregir esta anomalía política de permanente enfrentamiento por otro sistema de integración, de concertaciones políticas, económicas, sociales y culturales en pos de un futuro mejor. La democracia paraguaya tiene demasiada deuda social. La cosa está cada vez peor. Y en esas condiciones no pudiéramos acumular fuerza social amplia para fortalecer la democracia y acrecentarla.

Si no logramos una concertación democrática que garantice el desarrollo, que al hambre se oponga la saciedad, que la inseguridad reinante sea reemplazada por la seguridad de nuestros compatriotas, existe el peligro que la gente busque trocar la libertad por seguridad y que una dictablanda nos recorte nuestras conquistas democráticas, por vías electorales. Llegó la hora de dejar de lado nuestros atavismos y pensar como moderno para construir una alianza capaz de pergeñar un futuro que garantice nuestra democracia y las libertades conquistadas en estos largos 20 años. Emitido del 24 de julio de 2009.